La fotografía de producto es un campo de acción que tiene como objetivo presentar un catálogo de productos a los clientes para despertar su interés hasta generar en ellos una necesidad de compra.
Por otro lado, la fotografía de producto es muy utilizada en la publicidad de medios de comunicación impresos como periódicos y revistas; también en medios digitales: sitios web, portales de noticias, revistas digitales, blogs, galerías fotográficas, entre otros.
Asimismo, los productos se diferencian de otros por algunas características particulares que les permiten sobresalir en el mercado.
Por esta razón, cuando vamos a tomar fotografías de producto lo más importante es identificar esas cualidades que debemos resaltar para conseguir las imágenes que deseamos. Por ejemplo: tamaño, textura, forma y color.
Uno de los factores que más influyen en el resultado de una fotografía de producto es la iluminación. Si sabemos jugar con la luz podemos resaltar las características del producto para presentarlo de la forma más atractiva posible a los clientes.
En la fotografía de producto es necesario ejercer un control sobre las luces, las sombras, los brillos y los reflejos para destacar esas cualidades que identifican al objeto, por consiguiente, el producto debe estar en perfectas condiciones porque cualquier detalle se hará visible.
Además, existen otros aspectos que debemos considerar como son el punto de vista, los ángulos y los fondos que acompañan a la fotografía de producto. Por ejemplo: fondos neutros o con modelos interactuando con el objeto.
Ahora que sabemos en qué consiste la fotografía de producto, conozcamos algunos consejos técnicos que nos pueden ser muy útiles para futuras producciones.
Ver también: 5 claves para introducirte en la fotografía de moda
Consejos técnicos para hacer fotografía de producto
1. Fondos neutros que resalten el producto
Para tomar fotografías de producto lo más recomendable es elegir fondos negros o blancos, por ejemplo: los fondos blancos se adaptan muy bien para los catálogos impresos y digitales.
Por otra parte, en el mercado podemos encontrar cajas de luz específicas para fotografía de producto o para reducir los costos también podemos usar materiales como una sábana, cartulina o las partes negras o blancas de un reflector 5 en 1.
2. Organizar el esquema de iluminación
Si podemos llevar a cabo la producción en la calle o en lugares abiertos, la luz natural nos brindará muchas posibilidades, para suavizar o difuminar este tipo de iluminación podemos recurrir a reflectores o difusores según las necesidades.
Igualmente, si decidimos trabajar en estudio y utilizar un fondo blanco un softbox, un fondo de papel, tela o vinilo pueden funcionar muy bien.
Si el producto que vamos a fotografiar es grande deberemos pensar en otros recursos o efectos posibles valiéndonos de lámparas, flashes, sábanas, papeles, sombrillas u otro tipo de accesorios para fotografía de producto.
Existen, además, kits de luces muy completos que ofrecen luz continua, flashes de estudio o kits de fotografía strobist. Para rellenar las sombras duras que puedan generarse por el uso de luz artificial, un reflector casero o comercial es el más apropiado para obtener los efectos deseados.
3. Preparar y cuidar todos los detalles del producto
Cuando vamos hacer fotografía de producto cada detalle es importante, por lo tanto, es necesario limpiar, ubicar y observar que todo esté en su orden.
Una vez comencemos a fotografiar el producto, juguemos con sus componentes o partes, variando las posiciones frente a la cámara o agregando elementos que enriquezcan la escena, para obtener imágenes diferentes que más adelante podamos seleccionar.
4. Elegir lentes de calidad
Aunque el ojo humano es el mejor lente que pueda existir, en la fotografía de producto, es indispensable contar con un buen objetivo que nos proporcione un resultado profesional.
Para destacar las cualidades del producto y mostrar características esenciales como su forma, color, material y textura, lo mejor es aprovechar las ventajas que nos ofrece un objetivo zoom o una focal fija.
5. Utilizar el trípode
La fotografía de producto exige realizar varias pruebas para asegurarnos de que todo se encuentre en orden: la posición del producto, las condiciones de luz, el fondo, los ajustes en la cámara, etc.
Así que para lograr los objetivos, ya sea para un catálogo o una campaña publicitaria, disponer de un trípode será de gran ayuda porque nos facilitará establecer el encuadre, una perfecta composición, optimizar el enfoque y trabajar con tiempos de exposición más prolongados.
Más aún, si contamos con un disparador remoto o ajustamos la cámara fotográfica para que disparé luego del temporizador, seguro lograremos mejores resultados.
Ver también: 12 consejos para obtener una buena fotografía de retrato
6. Configurar la cámara en modo manual
La configuración manual es ideal cuando vamos a tomar fotografía de producto, porque nos permite ajustar y controlar: el diafragma, tiempo de exposición, el enfoque, la profundidad de campo y la sensibilidad de la película.
Al mismo tiempo, que realizamos cambios en la ubicación del producto, ajustamos la intensidad de la luz y cuidamos todos los detalles del encuadre y la composición.
Del mismo modo, es recomendable utilizar diafragmas f/11, f/13, f/14 f/16 f/18 f/20…, es decir, altos para que la apertura sea reducida y así lograr una mayor profundidad de campo.
En contraste, debemos elegir una sensibilidad de película baja para evitar la presencia de ruido en las imágenes.
También es conveniente usar el flash en modo manual para controlar los destellos y así mismo el enfoque, de forma que podamos ajustarlo cuando sea necesario.
7. Hacer balance de blancos
Cuando vamos a realizar fotografía publicitaria o fotografía de producto, es muy importante hacer un balance de blancos, antes de disparar con la cámara, para que el objeto sea una fiel representación de la realidad.
Esto es posible conseguirlo, primero usando una tarjeta de grises que nos facilite hacer un correcto balance de los blancos en la etapa de edición.
Segundo, es recomendable que disparemos en RAW para hacer variaciones en el balance de los blancos durante la etapa de edición conservando la calidad y la realidad de la imagen.
8. Jugar con los planos, ángulos y la perspectiva
La fotografía de producto exige de nosotros mucha creatividad, ya que la idea es ofrecer imágenes al consumidor, atractivas y deseables.
Así que para cumplir con este objetivo, deberemos proponer diferentes ángulos y perspectivas o cambiar la posición del producto para ir obteniendo variaciones en las imágenes que nos serán de gran utilidad al momento de la edición.
Algunos accesorios que podemos usar para jugar con la posición del objeto son plataformas, hilos invisibles o estructuras.
Esto es importante tenerlo presente, porque no es lo mismo fotografiar unos zapatos a un bolso de tela o unas copas de cristal a una mesa de escritorio.
Cada producto posee unas propiedades específicas que implicarán unos ajustes especiales en cuanto a iluminación, ubicación, fondo, perspectiva y otros parámetros que deberemos considerar para que la fotografía de producto salga perfecta.
9. Editar la fotografía de producto
Después de la producción fotográfica lo más indicado es realizar una correcta edición de las imágenes.
Para esto deberemos comenzar por hacer una selección de las mejores fotografías y ajustar en ellas el balance de los blancos, definir los blancos y las sombras, aplicar filtro de enfoque y si es necesario hacer un re-encuadre de la imagen.
La edición de la fotografía publicitaria o fotografía de producto nos sirve para pulir todos esos detalles que buscamos mejorar o resaltar.
La fotografía de producto: una integración entre la técnica y la creatividad
En resumen, para obtener buenas fotografías de producto debemos comenzar por conocer muy bien las propiedades o cualidades del objeto y descubrir las mejores posibilidades técnicas para fotografiarlo.
Por ejemplo: si vamos a tomar fotos de un reloj de oro, entonces hay que pensar en cómo resaltar sus brillos, su textura, formas y detalles.
Por el contrario, si vamos a fotografiar una vasija de cerámica, entonces deberemos concentrarnos en destacar más la textura, luces, sombras y colores.
Para cada producto es necesario diseñar un esquema de iluminación que nos permita revelar de forma atractiva sus cualidades y obtener las mejores imágenes que formarán parte de nuestro catálogo.
No obstante, la creatividad será fundamental para ofrecer a los clientes, observadores y curiosos imágenes inolvidables, que más que impecables puestas en escena nos hagan pensar que el universo expuesto allí es real.
Ahora para terminar, compartimos este interesante video que enseña cómo hacer un estudio casero para tomar fotografías de producto.
Y tú ¿tienes experiencia en fotografía de producto?, ¿cómo han sido estas experiencias?, ¿qué otros consejos agregarías a esta lista? Esperamos tus opiniones y comentarios.
Comunicadora en Lenguajes Audiovisuales egresada de la Universidad de Medellín. Con experiencia en periodismo escrito y alternativo. Una apasionada del periodismo, la literatura, la comunicación digital, las redes sociales y la fotografía. Actualmente me desempeño como periodista y comunicadora digital.
